El Día Internacional de la Felicidad se conmemora anualmente el 20 de marzo. Esta fecha fue escogida simbólicamente por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con la finalidad de darle valor e importancia a la felicidad como desarrollo integral y bienestar.
“Reconocer la relevancia de la felicidad y el bienestar como aspiraciones universales de los seres humanos y la importancia de su inclusión en las políticas de gobierno“, es el motivo que alegó en su resolución la ONU para dictaminar esta fecha.
Un estudio en colaboración con Gallup, el Oxford Wellbeing Research Centre, la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de la ONU y el Consejo Editorial del Informe Mundial de la Felicidad (WHR por sus siglas en inglés) analiza cuáles son los países más felices del mundo y anota algunas conclusiones sobre ello.
Esto terminó con la tendencia positiva de felicidad
Uno de los hechos constatados con el estudio es que “la tendencia global positiva en la satisfacción vital” entre las edades de 15 a 24 años acabó con la pandemia del coronavirus.
El informe, que está basado en encuestas realizadas en 143 países y cuya publicación coincide con el Día Internacional de la Felicidad (20 de marzo), se centra este año por primera vez en analizar la felicidad en las diferentes etapas de la vida.
Este es el país más feliz del mundo
Finlandia se sitúa en el puesto número 1 por séptimo año consecutivo y le sigue de cerca Dinamarca y luego van Islandia, Suecia, Israel, Países Bajos, Noruega, Luxemburgo, Suiza y Australia.
Los autores apuntan que tradicionalmente se asocia la felicidad a la juventud y se piensa en la vejez como una etapa de la vida menos feliz, pero la realidad actual desmiente esas ideas.
Desde 2006-2010, la felicidad en el grupo de personas de 15 a 24 años ha bajado notablemente en América del Norte, “hasta el punto de que los jóvenes son menos felices que los viejos”, y también ha caído en ese grupo, aunque de manera menos abrupta, en Europa Occidental, dice el informe.
Por el contrario, la felicidad en todas las edades ha aumentado marcadamente en Europa central y oriental, de modo que “los jóvenes ahora son igualmente felices en ambos partes de Europa”.
FUENTE: EL PERIÓDICO